Arantza Ríos
Si nos dejamos llevar por los miedos, estos pueden tener unas consecuencias muy negativas sobre nuestra carrera profesional.
Muchas veces, ante una promoción laboral, hemos escuchado el siguiente comentario: “No entiendo cómo han promocionado a este compañero y no a mí; yo sé mucho más que él”. Es posible que esto sea cierto, pero también suele ser cierto que los buenos profesionales que además se arriesgan y se exponen ante sus superiores, consiguen mejores resultados en su evolución profesional, que aquellos otro técnicamente brillante, pero que pasan desapercibidos. Si nuestro objetivo es progresar profesionalmente, de nada nos sirve ser muy buenos en lo que hacemos y mantenernos en el anonimato.
Por lo tanto, de ti depende, en gran medida, tu evolución profesional. La postura que adoptes ante el miedo será uno de los factores que claramente va a contribuir positiva o negativamente sobre tu carrera profesional.
Cualquier miedo tiene asociado una serie de posibles efectos que se pueden producir y además, todos ellos tienen en común que algo te pierdes cuando te dejas llevar por el miedo. Veámoslo con un ejemplo: El “miedo a no mostrarte”, puede tener como efecto “pasar desapercibido” dentro de tu empresa, y en consecuencia, lo que te estás perdiendo es “que no cuenten contigo”.
Otro ejemplo: “el miedo al cambio” podría tener como efecto “quedarte obsoleto, no avanzar” y en consecuencia lo que te estás perdiendo es “mejorar tu futuro y el de tu empresa”.
No cabe duda que es más cómodo mantenerse en esa zona de confort, de no exposición, pero si te quedas ahí, tienes que asumir las consecuencias.
Entonces, ¿qué podemos hacer para salir de esta zona de confort? Primeramente, identificar a qué tenemos miedo, por qué y para qué nos sirve; después analizar qué consecuencias este miedo puede tener en nuestro desarrollo personal y profesional y lo qué te estás perdiendo; a continuación, reflexionar sobre qué podemos hacer para vencerlo ó minimizarlo y por último, decidir que queremos hacer con el miedo: afrontarlo y progresar o quedarnos tal y como estamos. ¡Tú decides!
No somos responsables de tener miedo pero sí, de permanecer en él.
Como dice Aratxa uno de los miedos más frecuentes a nivel profesional es a mostrarse y ser visible. Sin embargo ese miedo desaparece cuando de verdad tomamos conciencia de lo importante que es tener visibilidad a nivel profesional, se trata de identificar y comunicar las características que nos hacen sobresalir, mostrar solidez profesional, plantearse metas y objetivos, desarrollar una identidad propia, ser relevantes, diferentes y visibles en un entorno cada vez mas complejo y cambiante, y mostrar desde ahí una ventaja competitiva. Totalmente de acuerdo en que hay que afrontar los miedo con valentía y progresar!
Me gustaMe gusta